El quinto día amaneció lluvioso, pero no por eso nos arredramos. Cogimos el metro y nos fuimos a ver La Défense. Llegamos a las ocho y media de la mañana, y al ser festivo, no había movimiento de ejecutivos y secretarias por allí, sólo algunos turistas madrugadores como nosotros y los sempiternos militares que rondan por los monumentos de París (al parecer, es el temor a ataques terroristas lo que hace que los militares vigilen por allí metralleta en ristre). Bueno...qué puedo contar de La Défense. Es curiosa, y aunque el arte contemporáneo no es muy santo de mi devoción, había cositas que me gustaron, como las escultuas con luces en el estanque, o las de Miró, que le dan colorido al conjunto grisáceo. Y por supuesto, La Grande Arche, más conocido como el Arco de la Defensa. Como notita curiosa, hay que mencionar que en el vano del Arco cabe cómodamente la Catedral de Notre Dame, es grande de narices, el cubo...digo, el Arco. Ahí van unas fotillos de la zona:
9 comentarios :
No tenía ni idea de que el arco de la defensa podría ser tan grande, aunque a mi modo de ver, esa carpa que tienen puesta afea un tanto.
Si un día ando por allí, te pediré el nombre del restaurante del chuletón ese....
Muy interesante el museo medieval ese, es una exposición temporal o permanente?
P.D.: Ültimamente tu página tarda mucho en cargar y relentiza, me pasa solo a mí?
No, a mí también me pasa, a lo mejor tengo un blog saturado ya de pequeñas cosas y tontunas.
La carpa del arco de la Defensa es un pegote, pero tiene su utilidad arquitectónica, por lo visto.
La exposición de los tesoros de la peste negra era temporal, pero si te metes en su página, verás que siempre están montando cosas nuevas.
El restaurante del entrecot...no me acuerdo del nombre. Un día, si tengo tiempo, te lo busco.
Vaya tela de crónica, señorita.
Por lo que veo no tenías tiempo ni de parar a mear. Eso es bueno, que nunca sabe uno cuándo va a estallar la siguiente Guerra Mundial que se lo cargue todo...
Por cierto, me acuerdo el día que inauguraron el Arco de la Defensa porque pasaron por debajo un escuadrón de Mirage Rafale, unos aviones militares cazas carísimos y ultranuevos. Me quedé de una pieza.
Seguiré leyéndote, ánimo!
No te preocupes, ya sólo me queda el último día. Luego lo imprimiré bonito,le haré una portada chula, lo encuadernaré en una copistería y lo venderé por los mercadillos.
gracias por tu comentario, y a Manuel, también, of course. Sois mis únicos lectores últimamente, junto con alguien de Montevideo que no dice ná.
No nos echas ni con lejía!
algunas leemos aunque no digamos nada.
bonito viaje.
saludos
Gracias, Maritra, lo decía por el contador de visitas, últimamente no veía mucha afluencia de visitantes. Yo también leo vuesto viaje y me encanta.
Soy un desagradecido, tu entras en mi blog cuando está enfermo y yo llevo varios dias sin entrar en el tuyo, pero en el pecado llevo la penitencia porque tu narracion del 5º dia es muy bonita y me la he perdido todos estos días. Me encanta como has disfrutado París. Es maravilloso visitar una ciudad que no has visto nunca pero que sabes tanto de ella. Si publicas el libro de tus vivencias en París cuenta con el primer comprador para el. Eso si me lo tendras que dedicar. Besitos.
A ti te lo regalo, pero eso sí, te lo dedicaré, claro que sí. Todavía me queda un día, y hay más Louvre todavía, jejejeje.
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