Tengo insomnio de nuevo. Son las cinco y cuarto de la mañana y aquí me tenéis, navegando. Y lo más divertido es que tengo un sueño que me caigo, pero es ponerme a dormir y mis pensamientos se ponen a correr como locos, salto de uno a otro como las cabras y me desvelo. Mr. G. está dormido y se levantará dentro de una hora. Y yo aquí, en el despacho, sentada y sin poder dormir, ¡con lo que tengo que hacer mañana! En fin, será mejor que lo intente de nuevo.
2 comentarios :
El insomnio me acompaña desde niña porque me ocurre igual que a tí,la mente va como un caballo desbocado,desde hace años me ayuda escuchar la radio para no fijarme en mis pensamientos.Saludos
Yo tengo épocas así, y me entran hasta taquicardias porque me enfado conmigo misma (cosa que no hay que hacer). Así que cuando me pasa lo llevo realmente mal. Espero que pase pronto la rachita, mientras tanto siempre puedes dedicarte a leer, escribir, coser... cualquier cosa que te haga sentir bien. Un beso.
Publicar un comentario